Dicen que el Rally Dakar es una de las pruebas más difíciles del mundo, junto con la "African Race" en el continente homónimo (o casi homónimo, porque le falta una "O"), el "Raje of the Chorros" en Berazategui y la Final de Matemáticas con la Battistoni en 2º Grado del Don Bosco.

Sin embargo, la inenarrable epopeya de la Peña de "Tampoco..." no se quedó atrás con las dificultades durante la llamada "Etapa Cero" de la citada carrera, que fue la Bahía-Dakar en Santa Rosa, Unanue y Otros Pueblos Ignotos, con 50 km de duro Enlace (jodido como todos los Enlaces) y más de 200 de Especial de Jamón y Queso en un sólo almuerzo.

Tan difícil ha sido la travesía que muchos de los concurrentes a la misma tuvieron que activar el Iritrack o "Baliza Satelital" que la organización proveyó a sus ojotas porque - víctimas de las temperaturas extremas de sus testículos y la deshidratación por falta de cerveza - estuvieron a punto de entregarse al Sueño Eterno y quedar perdidos en la inmensidad patagónica del patio del hotel.

Falló todo: falló el G.P.S., el P.V.C., el E.A.P.P., las cartas de navegación, las cartas del Tarot, las brújulas, los relojes despertadores, la Commodore 64 de a bordo y los Tamagochis. Sólo la cámara heroica de Obe continuó filmando aún en los momentos más aciagos, para proveer a las generaciones que nos siguen de un testimonio de valentía, heroísmo, decisión, arrojo y (por qué no decirlo?) valentía.

De sueños que parecieron eternos, dificultades extremas y supervivencias es que trata este segundo Trailer, nueva forma que tengo para hacerme el dolobu e ir editando de a un cachito por vez, porque hace calor para estar frente a la compu, viste?

El video largo... otro día.